¿Cómo una marca como Visa llega a imprimir en sus tarjetas de crédito la imagen de unas colegialas?
Esa es la pregunta que me formulé la primera vez que vi esta imagen. Después de investigar un poco, leí que Visa y Konami colaboraron para promocionar un simulador de citas muy famoso en Japón llamado Love Plus.
Para que os hagáis una idea, estos simuladores consisten, muy resumidamente, en camelarte a una chica mona para que sea tu novia. En algunos simuladores puedes mantener relaciones sexuales con ellas y en otros no. Lo digo porqué los he probado. Soy así de pervertido/curioso.
Mi opinión al respecto, que de hecho es lo menos importante, es que es un producto que engancha a todo aquel que ansia y necesita el amor de una mujer a la que, por las razones que sean, no llegan a conseguir en la realidad. De esta forma, los consumidores de este tipo de productos viven enganchados a una fantasía donde el máximo placer que obtendrán será cascársela mirando una pantalla de pixels que le habla.
Bien, esa es una parte de la historia, la segunda es la que os explicaré ahora… Por supuesto, esto no lo han dicho oficialmente pero este tipo de colaboración tiene como fin atraer a un grupo de hombres japoneses (salaryman solteros) para que adquieran una tarjeta de crédito Visa customizada con las colegialas angelicales.
Suelen ser personas que consumen bastante y algunos pueden llegar a ser muy otakus en relación al anime y manga relacionado con chiquillas dóciles e inocentes. ¡Ojo! Eso no significa que no sean buenas personas… Cada uno tiene sus aficiones.
Algunos/as os estaréis preguntando si no les da vergüenza pagar con una tarjeta así. Pues bien, si algo tiene Japón es que a la gente se la suda bastante este tipo de cosas a nivel social. Después a nivel personal es otro tema pero como el respeto y otras sandeces (siempre queda bien escribir la palabra sandez en vez de tonterías) culturales son lo primero, por mucho que uno utilice esta tarjeta en cualquier tienda de Japón, nadie hará ningún comentario al respecto (a espaldas es otro tema).
Tiene narices como una tarjeta de crédito, que se supone que es el arquetipo de que uno a llegado a la edad adulta a nivel financiero (mentira gigante que no cabe en el post), puede acabar con unas colegialas impresas en ella. Por supuesto, todo esto es un prejuicio pero vamos, como no diga algo con un poco de sustancia, esto puede ser más aburrido que un suéter viejo abandonado en un callejón de Asakusa.
Lo que me parece gracioso y a la vez triste es que el concepto que te vende Visa y Konami es que el amor esta lleno de ventajas.
Toma amor.
Sea como sea, lo importante del post a nivel de reflexión publicitaria es que para atraer a un grupo determinado de gente a Visa, la marca se adapta perfectamente a la cultura que viven y consumen, sin que por ello les importe les valores asociados a un simulador de citas, con todas las connotaciones y prejuicios que pueden acarrear.
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